La primera parte estaba bien, la segunda era digestible, la tercera era infumable y la cuarta para quemarla.
La aventura empieza cuando la manada de Ice Age queda dividida a raíz de ello los tres protas (mamut, dientes de sable y perezoso) han de buscar la manera de rencontrar a la hija y la madre del primero.
Pese a que los efectos de animación digital son extraordinariamente buenos, el guión manda parte de la peli al traste, ya que la originalidad y la imprevisibilidad se dejó por el camino. Personajes nuevos como el pirata, la abuelita y otro tigre son inconsistentes, igual que las escenas dotadas de humor (si es que se puede llamar así) que tienen la virtud de dejar al espectador totalmente frío, válgase la redundancia.
Si hay algo que puede salvarse de esta entrega es la banda sonora, compuesta por John Powell, el mismo compositor que puso música a Happy Feet y Rio.
Esperemos, por el bien de nuestras neuronas que no haya una quinta, aunque si la hay, ¡Por favor, que cambien los guionistas!
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Gracias guapa! Haces unos outfits increíbles! <3 Besos!
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