‘Corazón de león’, el tamaño no importa

Comedia romántica argentina dirigida y escrita por Marcos Carnevale (Elsa & Fred (2005), Anita (2009))  que viene a decir en definitiva que la sociedad se fija en el exterior y el físico de las personas tanto en el ámbito profesional como en el sentimental. Por desgracia no valoramos al ser humano  por sus capacidades, sino por su aspecto. Todo esto está amenizado desde una perspectiva divertida representada en la figura de León Godoy, el personaje masculino que encarna Guillermo Francella, un señor muy bajito de 1,35 renombrado arquitecto argentino y una imponente y guapísima Julieta Díaz en el papel de Ivana (alias “casa”), una abogada de éxito. El film tiene sus momentos, y no todos buenos.

La primera escena de la película ya empieza fuerte, con una llamada telefónica. Se ve que Ivana ha perdido el móvil y el caballeroso y espléndido León la llama –sin conocerse de nada- para intentar devolvérselo. A partir de ahí se palpa una desconcertante empatía entre ambos, que da hasta miedito. Cuando queda, Ivana se da cuenta que León es el hombre de su vida: simpático, detallista, con sentido del humor…¡pero muy bajo! ¡Le faltan por lo menos 40 centímetros! León apuesta por la relación desde el principio pero Ivana –y esto es lo que cuenta la película- tendrá que superar los prejuicios sociales y los suyos propios si quiere estar con un hombre tan bajo.

La postproducción está muy bien cuidada, se nota que hay detrás un intenso y meticuloso trabajo, sobretodo por lo que se refiere al proceso de “enanización” en el actor principal. Tecnología punta al detalle, porqué no se nota para nada que el actor tiene una estatura normal. También actúa el hijo de Francella, Nicolás. Si, el biológico. Lo que hace pensar que aquí huele  a gato chamuscado, a enchufe o a un “Eh, aquí está mii hijo, mi heredero cinematográfico, abridle también las puertas”.

Aunque la gente se rió un montón en la sala, para mi gusto la película no acabó de cuajar. Y aunque las caras de Francella  y Díaz son un poema en algunas escenas. Encontré que le falta un poco más de chispa, algo que lo armonice todo, porqué parecía precipitado, casi inverosímil. Ahora sí, los actores clavan la interpretación, Pese a ser tan chorra se plantean los estereotipos de esta porquería de sociedad en el que si no eres alto y guapo no tienes éxito, o por lo menos no se te valora de la misma manera. Y si no eres así, te lo tienes que currar mucho más. Plantea una realidad como un piano bajo una fachada que no tiene apariencia de verdad. En este sentido recuerda a Amor ciego en el que Jack Black se enamora de Gwyneth Paltrow.

La previsibilidad de la película se cubre en los momentos vacíos con música a todo volumen.

A decir también que el  final chirría por todas partes. Y me refiero que ese pequeño trozo de 5 minutos no liga con el ritmo de toda la película, sino que parece más bien cómo si quisieran un final de sopetón: cerrado, barrado y fin de la peli. Hala, los de la butaca, ya os podéis ir a casa.

 

3/5

Imágenes: Facebook Oficial.

Fuentes: IMDB, Filmaffinity.

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