Acabo de salir de ver Cuatro fantásticos.
Sí, estoy bien. Gracias por preguntar.
No, no se me han dañado las neuronas, creo.
Sí, es un petardo abismal.
No sé que se habrán fumado para hacer semejante bodrio. Y lo dice esta humilde bloguera que es una friki de Marvel. Vi las dos primeras de Los cuatro fantásticos (2005) y Los cuatro fantásticos y Silver Surfer (2007) cuándo Los cuatro fantásticos eran de Marvel Cinematic Universe y todavía no le habían vendido los derechos a la 20th Century Fox, que es la productora de la película que nos ocupa.
Aunque esta producción ya estaba muerta antes de estrenarse. No es ningún secreto que el director y la Fox se llevaban como el perro y el gato, razón por la cual el primero los puso a caldo en twitter diciendo que ‘ Hace un año, tenía una fantástica versión de esto. Y hubiese recibido buenas críticas. Esto probablemente nunca lo van a ver. Sin embargo es cierto’. Century Fox había cambiado toda la película a su gusto y el director ya adelantaba que él no tenía nada que ver con el resultado final y que ‘nunca volvería a trabajar en una película que versionase un cómic’. Después fue la crítica la que se la cargó a base de bien. Una amiga también me avisó que ni se me ocurriese poner un pie en la sala, que la peli era terrorífica y que vaya truño habían hecho. Y claro, no lo pude resistir: entre que teníamos entradas gratis y que habíamos agotado lo bueno de la cartelera, decidimos ir a ver una piltrafa. Sabiendo de buenas a primeras que era una gran comedia, digooooo….una de ciencia ficción. Y reír, me reí. Me descojoné hasta el punto que el señor que tenía en la butaca de mi derecha empezó a mirarme raro, y claro, la risa se pega hasta el punto que acabamos como si en vez de una de los 4 fantásticos, estuviésemos viendo un monólogo de Dani Rovira. Y no porqué la peli fuese un desternille, sino porqué no había quién se tragase aquello sin jolgorio de por medio.
Debo mencionar con saña y cierto gustirrinín los efectos especiales con croma (cortina dónde se proyectan imágenes) perfectamente visible, que más que efectos especiales parecía estar viendo el tiempo en TV. Que todo el mundo sabe poner la cortina y proyectar algo. Para llorar. De la risa.
Si además de mal guión, terroríficos efectos especiales se le añade a la compota unos actores que no saben actuar (ahí exceptúo a la pobre antorcha humana que debe ser el único resquicio de decencia en esta producción) pues el film acaba siendo el club del chiste en versión largometraje. Entre el protagonista, que es más soso que una sopa de ajo –seguro que le pinchas y sale horchata-, la chica que parece salida de un fumódromo y actúa como si estuviese drogada y el amigo (futuro La Cosa) que el espectador se pasa toda la película preguntándose qué leches hace en esta película, el malo malísimo (Víctor Van Muerte) que va más chutado a sumiales que una modelo y la Antorcha –el único decente- que más o menos hace algo pero no se sabe muy bien qué.
La química entre los actores es nula. Y los diálogos telegráficos. Humor, simplemente no se encuentra. No hay por dónde pillar la película , básicamente porqué ni los mismos actores se creen el personaje que están haciendo y los que participaron en ella ya sabían que era una gran merluza antes de acabar de montarla. Lo de la máquina del especio temporal es de delito. En serio ¿alguien se cree que ese cacharro puede estar hecho por unos críos? Por no hablar de la introducción excesivamente larga y el reclutamiento de los personajes principales en una base armada –secreta, que es muy estadunidense- para usarlos como soldados.
Los experimentos caseros con gaseosa son más científicos que esta película. Por ejemplo, todo fan de la teoría espacio-temporal sabe que la cuarta dimensión es un tiempo y no un lugar. O que el vórtice se tendría que llevar algo más que los coches o que, si se usan respiradores en la ‘nueva tierra’ que pisan ¿porqué no los usan también en la batalla final? La respuesta está clara: los derechos de los Cuatro fantásticos habrían vuelto a Marvel si Fox tardaba más de lo convenido (unos 8 años) en producir una película. Es tal la obsesión recaudatoria de la Fox que cuándo Kate Mara (Susan Storm, la de la peluca) quiso leer cómics de Los cuatro fantásticos para prepararse para su papel, los cineastas le dijeron que ‘no era necesario ya que la película era una historia original que no se basa directamente en los cómics’. Es más, en un inicio, Josh Trank (el director) preveía esta película en 2 horas y 20 minutos de duración; pero Fox la cortó a 1 hora y 30 minutos volviendo a grabar escenas (re-shoots) porqué no estaban satisfechos con el trabajo de Trank, lo que hizo que la película se retrasase un año más. Decir que el sitio web oficial de Marvel Comics no menciona esta película en absoluto, lo que da una idea de lo poco orgullosos que están de la producción.
Comparando las primeras películas de Los cuatro fantásticos con ésta, hay hechos que saltan a la vista: no se ve por ninguna parte los famosos trajes azules, la Cosa va sin pantalones y en vez de maquillaje está creada por captura de movimiento, digitalmente, lo que es más cómodo para el actor –no se suda tanto-. Para el papel de Antorcha, Jordan fue a consultar a Chris Evans que hizo el papel de Johnny Storm en las dos primeras películas. Según el actor, Evans le dijo ‘sólo disfruta de la película. Va a ser divertido’. Seguramente el lector se estará preguntando como encaja todo este embrollo: la música del tráiler es la melodía del tema de –la genial- Broadchurch (2013), en unos personajes que reflejan los cinco elementos de la mitología china (metal (Víctor Van Muerte), fuego (Johnny Storm), agua (Reed Richards), aire (Sue Storm) y tierra (Ben Grimm), y que además todos ellos viven en ‘Central City’ –ahí casi me caigo de la butaca-: Central City es el hogar del superhéroe de DC Cómics The Flash.
-Lentejas.
-Mira, un unicornio por la AP-7.
-Le tengo ganas a un cocido de morcilla.
Fin.
Créditos.
Sería fantástico que dejasen a los personajes en papel. Que dejasen de destrozarlos, o que si por aquellas cosas de la vida se les va la tuerca, que lo hagan con un mínimo conocimiento sobre lo que están produciendo minimizando los cantos de sirena que, al final, acaban en un níveo porvenir.
La clasificación por edades también está mal hecha. ¿Hay algo que funcione en este film? No. Porqué ver como le explota la cabeza a un hombre no creo que sea muy lúdico para un niño de siete años si para nosotras fue violento y les cuadriplicamos la edad. Pero vamos, que hay padres para todo. De momento espero que después de semejante patraña y del batacazo final sin pausa pero sin frenos Century Fox sepa- y sino aquí lo dejo patente y por escrito- que la ha cagado de manera abismal, bestiaja y descomunal cargándose a los personajes de Marvel en dos horas de terrorífica producción infumable –si la veis, sabréis que el rollo fumeta le va mucho-. Y con ello, que devuelvan los derechos a quien les pertenece, -es decir, a Disney/Marvel- para que los puedan rescatar del estercolero dónde los han metido.
Aunque como digo, siempre nos quedarán los originales. Que esos sí son buenos. Esta también lo es, pero para echarse una siesta porqué realmente hay que estar muy ido de pinza para que guste semejante mojón. Eso sí para el 2017 prepararé una bolsa para vomitar porqué harán otra (Fantastic Four 2 (2017)), para horror de todos los fans.
¡Hola! pues a mí si me gustó la película xD
ResponderEliminarBesos.
Uffff!!! Yo ya lo he dicho todo. Y no me voy a repetir. Gustos, como los colores!
EliminarUn besoteee!!!
Yo no se que odio le tienen al personaje de Sue Storm porque le pone cada actriz, entre Jessica Alba que estaba en las anteriores para lucir palmito y Kate Mara en esta para lucir cara de haber estado un día chupando sapos no gana para disgustos el personaje. Y después lo gratuito que fue la muerte del padre ¿que sirvió para? Ah si, para dar motivaciones a Johnny y Sue. ¡Venga ya! Si les duro la pena dos segundos y las ganas de venganza menos. Después el director habla de igualdad pero a la primera oportunidad se carga al negro. Pero reconozcamos la pelicula no ha triunfando porque no salia Stan Lee xD.
ResponderEliminarUn saludo!
Ahí: 'yo no soy racista, eh? pero nos cargamos al de ascendencia africana y nos quedamos tananchos', pensó el director. Una tomadura de pelo, totalmente disgregada y además ni cameo ni nada, por no hablar de -ninguna- escena post créditos. De hecho ni figura en la base de pelis de Marvel (no es extraño que no la quieran ni ahí). Un chungeo al espectador elevado al nivel del blockbuster, una excusa para no devolver los derechos a quién de verdad le pertenecen.
EliminarUn saludo!
Me encantaría decir algo más, pero tu lo has dicho todo y con lujo de detalles y argumentos, así que sólo me sumo diciendo que tienes toda la razón.
ResponderEliminarLa película es un asco.
¡Gracias Irissë!
Eliminar¡Un besote! ♥
Tienes toda la razón, la película es un truño de principio a fin.
ResponderEliminarLas secuencias iniciales carecen de fundamento, la relación entre los personajes no es verosímil, Reed Richards es repelente y su amigo Ben insustancial. Pero la película va empeorando por momentos y nada tiene sentido!!
El inicio es caótico... la clase, la feria de ciencias, la explosión gratuita de una canasta y sólo de una canasta, el que por allí pase el curioso benefactor de una fundación de cerebritos dedicados, mira por donde, a viajar a otra dimensión, ¡qué casualidad!... todo el argumento es una sucesión de eventos sin ton ni son, no hay trama.... el gobierno es malo, porque es el gobierno, pero ¿qué escusa tiene el resto?.
Hasta el Dr. Muerte da pena, pobre infeliz!
Un saludo
Hola Francisco!
EliminarA veces me pregunto que se habrán fumado los de Fox para hacer semejante patraña. De hecho, no me lo quiero llegar a imaginar y dudo que ni siquiera hayan hojeado los cómics que en su momento escribió Stan Lee y dibujó Jack Kirby. Lo que me hace sentir, a parte de vergüenza ajena, que se burlan los miles de fans. Es lo que pasa cuándo el ansia de dinero prima más que la calidad. Estoy de acuerdo en todo lo que dices: no hay por dónde pillarla. Recuerdo estar en el cine y alucinar -para mal- en cada escena. Hasta me pareció ver el croma del estudio. Y para colmo -el horror-, todavía nos queda aguantar por lo menos dos pelis más.
Un saludo!