El exótico Hotel Marigold

¿Qué pasa cuando uno llega a la edad dorada y quiere disfrutar de su jubilación? Esa es la situación en la que se encuentran siete jubilados londinenses, que al buscar tranquilidad acaban todos dando con un “aparente” lujoso hotel para la tercera edad situado en la India. Sin pensarlo dos veces, los protagonistas cogen, cada uno por su lado,  el primer vuelo  con el objetivo de empezar una nueva vida y la  más entrañable aventura.

El director, John Madden,  conocido por films como La Deuda o Shakespire in Love  ha conseguido reunir en ésta a un reparto de lujo, como Judi Dench,  Tom Wilkinson, Bill Nighy, Penelope Wilton, Ronald Pickup, Celia Imrie,  Maggie Smith y Dev Pattel. La cinta muestra a unos personajes redondos que van evolucionando paso a paso gracias a un guión bien elaborado basado en  la  adaptación de la novela de Deborah Moggach “These foolish things”. A destacar la banda sonora, compuesta por Thomas Newman, que  crea una partitura muy apropiada.

Con 78 años Judi Dench y Maggie Smith (que ya trabajaron juntas en Una habitación con vistas) interpretan dos de los papeles más interesantes de la película. Dench es una viuda a la que su marido le deja solo deudas y Smith interpreta a una ama de llaves solterona que odia, literalmente, todo lo que no sea británico y que se ve obligada a ir a la India para someterse a una operación de cadera. Por  su parte, Tom Wilkinson, le da vida a un juez del Supremo gay, mientras que Bill Nighy viaja con su esposa esperando que su hija les devuelva los ahorros prestados. Cabe decir que la entusiasta interpretación  como propietario del ruinoso hotel que hace Dev Patel, pone el punto cómico.

A cada uno de los personajes los envuelve una historia, un motivo personal que los ha conducido hasta allí, pero lo que les diferencia, también les une, sobre todo el hecho que todos quieren y están dispuestos a iniciar una nueva vida. A todo esto, cabe añadir el susto que se llevan los protagonistas al ver que el hotel no era precisamente como la web lo pintaba, sino que está íntegramente para remolque y que para colmo, han de pasar una larga temporada allí.

Agradable mezcla entre comedia y drama ( a partes iguales) sobre las incertidumbres de la vejez,  el choque de culturas entre indias y londinenses, amenizado con unos personajes entrañables que se ganan enseguida el respeto y el cariño del público. Nunca una película tan larga (casi dos horas)  me había sabido tan bien, al hacer comprender que, pese a lo que nos quiere hacer creer la sociedad, la vida, por mucho que se empeñen, no se acaba a los 70.

“Al final todo irá bien. Por lo tanto si no va todo bien es que todavía no es el final”. 

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